En la segunda fecha del Torneo de Juveniles de Superliga, San Martín no pudo recibir a Boca por cuestiones de logística y fueron las categorías mayores las que visitaron Casa Amarilla tal como estaba previsto en el calendario. Los más chicos, recibieron al Xeneize este sábado, en la impecable cancha de «La Olla», ubicada en el Complejo Natalio Mirkin.

La mañana calurosa arrancó con el cotejo de la Séptima División. Dos equipos con las realidades opuestas, hacían presagiar una victoria cómoda para los visitantes Sin embargo, los chicos del Santo jugaron un partido inolvidable y lo empataron 1 a 1, contando con chances para ganarlo.

San Martín se puso en ventaja con el gol de Carlos Ovejero. El 9 recibió la pelota dentro del área, enganchó y definió cruzado dejando sin chances al golero de Boca, cuando se jugaban 24′ del primer tiempo.

La respuesta de Boca no se hizo esperar, urgido por la necesidad de quedarse con la victoria para poder meterse en semifinales. Ezequiel Almirón encontró mal parada a la defensa y puso el 1 a 1 ante la salida del arquero Nicolás Peñalva, inmediatamente después del gol de San Martín.

En el segundo tiempo, el dominio y las acciones fueron de color rojo y blanco. Los chicos de Boca no salían de su asombro ante la agresividad de un San Martín que buscaba sumar sus primeros puntos del campeonato.

Las atajadas del arquero Peñalva, una chance inmejorable de Elías Segura para darle la victoria a San Martín y el árbitro que parecía hacer fuerza para la visita, fueron los protagonistas en un final apasionante, que culminó con empate en uno.

Ahora, los chicos llegarán con un envión anímico importante al clásico ante Atlético.